El "robondeo"

17 de Febrero de 2002

En un artículo de Francisco Capella este mes pasado, el autor se quejaba de los que protestan por las subidas debidas al euro, el famoso "robondeo". Temo que debo disentir. Pienso que es un error aplicar la teoría económica sin más, olvidando que el fundamento de ésta es la acción humana, que a veces no responde a los patrones teóricos, sobre todo si éstos asumen un punto de partida que no se da en la realidad.

Es indiscutible que, en el mercado libre, los precios se ajustarán según la interacción entre oferta y demanda. Sin embargo, el hecho es que durante este mes que acaba de terminar se haya dado una subida tan unánime de precios (según se apunta en la OCU) no parece ajustarse a ningún cambio real de la economía. Tan sólo al cambio de moneda en nuestras transacciones cotidianas. Y es que es precisamente la moneda la que no se haya sujeta al mercado libre, nuestra suposición inicial.

Y es que, al valorar subjetivamente los consumidores españoles el precio de los productos usábamos un patrón numérico. Al preguntarme si valoraba más mi dinero que aquello que iba a adquirir con él contaba con la experiencia y la costumbre de hacerlo. Al romperse ese patrón para todos y a la vez, gracias al monopolio estatal sobre la moneda, todos estamos padeciendo una cierta desorientación en nuestra estimación subjetiva del valor, que ha sido aprovechada por los ofertantes para redondear al alza. No mucho cada uno, generalmente solo unos pocos centauros (o céntimos de euro) pero que sumados van a dar un IPC de enero interesante.

Pero claro, esto significa que la causa del "robondeo" no está en los pérfidos comerciantes sino en el bienamado Estado. Como casi siempre. No todos los que protestamos le echamos la culpa al mercado. Algunos preferiríamos menos intervención estatal, incluso en la moneda, porque el sector privado maneja estos asuntos mejor que el público. Como demuestra el hecho de que, incluso cuando rogaban a los mercaderes que no redondearan al alza, han sido los productos dominados por los distintos gobiernos de nuestro país en los que se ha robondeado más y mejor.